domingo, 15 de marzo de 2009

Fenómeno,noúmeno,Matrix y voluntad.

Las paredes de mis constructos teóricos no paran de moverse,se desmoronan. Yo subo por ellas,para intentar sostenerlas y que no caigan al vacío arrastrándome.Pero miro hacia abajo,y el abismo es inmenso.

Porque ya no le veo sentido alguno cualquier tipo de sentimiento instintivo,ya que eso se esfuma en el aire,como el humo de un cigarro. Porque es absurdo percibir la mayoría de las cosas, de las cosas meramente placenteras o estéticas, porque sólo vamos a conocer a través del fenómeno,el noúmeno jamás vamos a poder olerlo,tocarlo,saborearlo,oírlo,verlo y sentirlo.

Porque vivimos en una realidad ficticia,Matrix ya está aquí.

Porque nos esforzamos en perder el tiempo y nuestra energía.

Aún no sé cuál es mi voluntad,pero el acueducto de mi filosofía se está derrumbando.

El día que conozca el noúmeno de la sinceridad y el respeto,quizás haya encontrado una vía de escape a la coacción de mi voluntad.



Esta es mi historia un vividor Borracho empedernido, un loco trovador.
Acariciando con mis dedos, maldiciendo el mundo entero.
Esperando al sol dije adiós a la ultima estrella
Suena el despertador joder, otra vez la noche en vela

Toda mi vida va encima de un trapecio
Por debajo el mar
Donde se unen todos mis defectos
Me dejo caer y a volar

Y sí mis sueños se los a llevado un viento
Ay al despertar
Creo que voy a salir corriendo
A ver si los puedo alcanzar

No creo en los reyes magos
Solo creo en los camellos.
Y a Papa Noel le gusta la nieve
No creo en los reyes magos
Solo creo en los camellos
Y a Papa Noel le gusta la nieve
Donde esta el bicarbonato
Anoche me bebí un barril
Donde esta el bicarbonato
Anoche creo que me bebí un barril

1 comentario:

maw dijo...

Y qué si nos arrebataron lo que nunca tuvimos.

Qué importan los conceptos intangibles de estética, placer o hedonismo cuando tenemos motivos perfectamente válidos para sudar y/o dar rienda suelta a nuestras más bajas pasiones.

Déjese llevar por sus instintos, aunque aún no los conozca del todo, Afrodita. Tiempo habrá de tallar la madera (de saber qué carajo queremos tallar); lo mejor es que vaya usted plantando ya semillas...

Y como no le dije una vez a alguien (que es peor incluso que decirle algo a nadie): "Olvídate de tus números, vente con mis letras". Aplíquese el cuento lo más egocéntricamente que pueda, y siga creando, siga, descanse como ahora mismo que le escribo en una entrada antigua, aún siendo la última, siga...

Cuando quiera, hablamos de patafísica con un buen petardo de skunk.
Salud.