Hace poco tuve el gran honor de asistir a otra realidad,otra dimensión,un mundo paralelo...donde convivían pacíficamente alcohólicos,porreros y politoxicómanos.
La frontera del sueño con el despertar era muy difusa y se mezclaba con el ambiente de los estupefacientes.
La basura y excrementos fluían en el espacio.
La felicidad y los efectos de las drogas se contagiaban vía aérea.
El sonido entra por las entrañas y te contamina de sensaciones.
El cuerpo se altera y quiere más.
Sólo ves cuerpos pidíendo sexo.
La luz y la noche se funden como los fluidos tras un coito.
La melancolía y la euforía.
Al final comienza el ajetreo donde empiezas y no quieres parar.Y una y otra vez sensaciones extrasensoriales.¿La barrera del sonido?Se rompe.Piel,sudor...
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